SOLICITA BRAVO ABARCA AL GOBIERNO FEDERAL CUMPLIR SU LABOR DIPLOMÁTICA PARA RECHAZAR EL IMPUESTO DEL 5% A LAS REMESAS QUE ENVÍAN LOS PAISANOS
* Urge al Congreso de la Unión impulsar mecanismos legislativos para defender loa derechos de los mexicanos en el extranjero
El Coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso del Estado de Guerrero, diputado Alejandro Bravo Abarca hizo un llamado al Gobierno de México para que cumpla su labor diplomática y fortalezca el dialogo bilateral con las autoridades de Estados Unidos para defender a los paisanos y rechazar el impuesto del 5 por ciento sobre las remesas enviadas desde el extranjero, que pretende aplicar el gobierno del norte.
En la máxima tribuna del Poder Legislativo de Guerrero, el priísta sostuvo que este tema afecta directamente a millones de mexicanas y mexicanos que han tenido que migrar por necesidad y a quienes pretenden aplicarle un impuesto del 5% sobre las remesas que envían a sus familias en México, iniciativa que dijo tiene un trasfondo político y discriminatorio.
"No podemos permitir que contribuyan con nuevos gravámenes a quienes siguen aportando de manera vital a nuestra economía y sosteniendo a sus seres queridos desde el extranjero", precisó y enseguida aclaró que las remesas no son un lujo, son la diferencia entre la pobreza extrema y la sobrevivencia para muchas comunidades de México.
Detalló que tan solo en los primeros cuatro meses de este año, los paisanos radicados en el extranjero enviaron más de 14 mil millones de dólares a México, y en abril, se alcanzó un récord histórico de más de 5 mil millones de dólares que llegaron a los hogares mexicanos.
"No estamos hablando de cifras menores. Estamos hablando del esfuerzo de millones de personas que trabajan largas jornadas, que enfrentan condiciones laborales precarias, y que a pesar de ello, siguen enviando apoyo a sus familias", recalcó.
Bravo Abarca señaló que si bien esta propuesta fue bloqueada por el Congreso estadounidense, el riesgo sigue latente, por lo que no debe darse por superada tal amenaza, razón por la que hizo el llamado al gobierno federal para que no cese en su labor diplomática y haga valer los instrumentos internacionales de los que México forma parte, como la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares, que dijo, debe ser una herramienta para proteger a quienes han sido despojados de todo, salvo de su voluntad de salir adelante.
"No estamos hablando solo de economía. Estamos hablando de justicia. Estamos hablando de dignidad, gravar las remesas es cortar el lazo más firme que une a nuestros paisanos con su país, es desconocer que, sin los migrantes, muchas regiones de México simplemente no tendrían respiro económico", sostuvo.
Bravo Abarca recordó que las remesas han sido, en años recientes, una de las principales fuentes de divisas para el país, superando incluso a sectores como el turismo o las exportaciones de petróleo, lo que se demostró en tiempos de crisis, como la pandemia de COVID-19, que fueron precisamente los envíos de dinero desde el extranjero los que mantuvieron a flote la economía de miles de hogares mexicanos, por lo que señaló que si se llegara a aprobar esta medida del 5 por ciento, se estaría provocando un efecto en cadena, menor ingreso disponible para las familias, reducción en el consumo, afectación al comercio local, y mayor presión sobre programas sociales.
Señaló que la imposición de un impuesto a las remesas representa una violación tácita a los principios de corresponsabilidad y respeto mutuo que deberían regir los acuerdos bilaterales e informó que en el año 2022, México recibió por remesas la cantidad de $58,497 millones de dólares, para el año 2024, se tuvo un incremento a $64,745 millones de dólares; este monto representa apenas el 0.2% del Producto Interno Bruto en Estados Unidos, sin embargo en México representa el 4% del Producto Interno Bruto; lo que esta en juego dijo, es el tipo de relación que se quiere construir entre ambas naciones.
Finalmente, el diputado precisó que es necesario exhortar al Congreso de la Unión para que asuma una postura, porque no basta rechazarlo de manera simbólica, se requiere impulsar desde dicha soberanía mecanismos legislativos que fortalezcan la protección de los derechos de los mexicanos en el exterior.
"Propongo que avancemos hacia la construcción de una agenda nacional de defensa del migrante, con representación parlamentaria, acceso a servicios consulares fortalecidos, y canales permanentes de consulta con nuestras comunidades en el extranjero. El mensaje debe ser claro: México no abandona a los suyos, sin importar en qué parte del mundo se encuentren", concluyó.